La Red GLORIA-Andes continúa aportando conocimiento esencial para comprender cómo las especies nativas sienten los efectos del cambio climático en los ecosistemas altoandinos. Se trata de un nuevo estudio que analiza cómo las plantas más comunes de los páramos y punas logran superar las barreras geográficas para dispersar sus semillas. El artículo “Estrategias de inversión en dispersión de diásporas en Compositae: el caso del altiplano andino”, fue publicado en la revista Annals of Botany con la participación de 29 investigadores de todos los países andinos, asociados a la red GLORIA-Andes.
El estudio analiza 125 especies de plantas en 47 comunidades ubicadas en las cumbres montañosas, determinando a partir de las características de sus semillas, cuánto “invierte” cada planta en su dispersión. Esto es importante en hábitats alpinos como los Andes, que están naturalmente fragmentados. Las montañas son como islas en el cielo, separadas por la geografía y el clima, por lo que las estrategias de dispersión de las plantas son un elemento clave en el mantenimiento de las poblaciones. En la actualidad, dos barreras principales dividen la Cordillera: la depresión de Huancabamba en Perú, que separa los Andes del Norte de los Centrales, y los cambios en altitud y precipitaciones que se dan entre los Andes Centrales y los del Sur, donde las cordilleras se estrechan. Pero estas barreras no son permanentes en el tiempo, y es posible que el cambio climático las afecte, por lo que es clave conocer las diferentes estrategias con las que las plantas andinas cuentan para superarlas y dispersar sus semillas.
La Red GLORIA-Andes es una plataforma regional de monitoreo a largo plazo que estudia los impactos del cambio climático sobre la biodiversidad de los ecosistemas de alta montaña en los Andes, en 74 cumbres ubicadas desde Venezuela hasta Chile y Argentina. Esta red de cooperación Sur-Sur, integrada por centros de investigación e instituciones andinas, ya tiene más de 10 años de actividad constante. Con este trabajo, la red contribuye una vez más a proveer información basada en datos cuantificables y estandarizados, esencial para evaluar los impactos del cambio climático en los Andes.